miércoles, 19 de noviembre de 2008

Introducción

Seguramente pocos políticos han tenido en la Historia Contemporánea de España una importancia comparable a la de Clara Campoamor (Madrid, 1888 − Lausanne, 1972), al tiempo que también pocos han sufrido un olvido como el suyo. Luchadora incansable por los derechos de la mujer, a su empeño personal y en más de una ocasión solitario debe nuestro país la consecución de toda una serie de logros en pos de la igualdad efectiva de mujeres y hombres y, muy en particular, el reconocimiento del derecho al voto de la mujer, establecido por vez primera en España en 1931 a través de la Constitución de la II República. Ese trabajo tenaz librado sin descanso supuso para ella demasiados conflictos, enfrentamientos y, en fin, su muerte política, siendo relegada desde entonces a un olvido del que solo a medias ha sido rescatada.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estimado caballero.
¿Se puede cuantificar numéricamente el abismo existente entre los políticos “elegidos” y el pueblo español?
Creemos que sí, y un magnífico modo es mostrar algo tan prosaico y material como el monto de sus honorarios.
Este es un caso raro de entrada blogera en la que con un único golpe de vista cualquiera podrá captar su principal significación; la injusticia y el divorcio orweliano y esquizofrénico que existe entre la teoría y la práctica de nuestro mundo actual.